En el primer día de la semana comenzábamos mirando al cielo, la mañana se veía fea pero los pronósticos nos hacían pensar que sería una tarde estupenda para poder disfrutar de los pasos.
Pronto comenzábamos. Tras visitar los templos y a nuestras hermandades nos veíamos todos en el Paseo de los Tristes, que alegría da estar allí y ver como cada vez se va juntando mas gente, Fredy, Sevilla, Juan Andrés..., y que buenos ratos de cuaresma hemos pasado este año.
Tras el tapeo, poníamos rumbo hacía la Iglesia del Perpetuo Socorro, aún mirabamos al cielo porque la lluvia no dejaba de caer, aún así no podía faltar nuestra tradicional foto.
Tras el retraso de la hermandad de la Burra nos fuimos para San Pedro, este año año por suerte Christian no estaba solo sino que estábamos todos juntos para poder pasear al Señor del Darro.
En el camino nos separábamos con algunos que se iban a pasear a la Encarna, lástima que no pudiera salir porque seguro, que habría sido un año espectacular para ese palio.
Ya en San Pedro tuvimos la primera desilusión de la semana, como niño que le quitan un caramelo veíamos como se abrían las puertas y comenzaban a salir los dos primeros tramos, pero la voz del Diputado Mayor de Gobierno diciendo "que se pare todo el mundo", hizo que en San Pedro escuchara uno de los silencios más incómodos de mi vida.
No pudo ser pero hoy por hoy nada que reprochar a las hermandad, ni por su puesto a la cuadrilla, posiblemente el pasado Domingo de Ramos dentro de San Pedro y cuando aún estaban las puertas cerradas se dio la chicotá soñada por cualquier cuadrilla.
Así y bajo una manta de agua terminaba el día que soñamos durante los otros 364, pero con la satisfacción de pasarlo con la gente que queremos...
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